martes, septiembre 23, 2008

VENDRÁ LA PAZ


Si tú crees que una sonrisa es más fuerte que un arma,
Si tú crees que lo que une a los hombres
es más fuerte que lo que los separa,
Si tú crees en el poder de una mano extendida,
Si tú crees que ser diferente es una riqueza
y no un peligro… entonces vendrá la paz.

Si tú sabes mirar al otro con un poquito de amor,
Si tú sabes preferir la esperanza a la sospecha,
Si tú estás persuadido que te corresponde
tomar la iniciativa antes que al otro,
Si todavía la mirada de un niño
llega a desarmar tu corazón…
entonces vendrá la paz.

Si tú puedes alegrarte del gozo de tu vecino,
Si la injusticia que golpea a los otros
te indigna tanto como la que tú sufres,
Si para ti el extranjero es un hermano,
Si tú sabes dar gratuitamente
un poco de tu tiempo por amor…
entonces vendrá la paz.


Si tú sabes aceptar que el otro te preste su ayuda,
Si tú compartes tu pan y sabes dar
con él un pedazo de tu corazón,
Si tú crees que el perdón consigue más que la venganza,
Si tú sabes cantar la felicidad de otro y bailar su alegría…
entonces vendrá la paz.

Si tú puedes escuchar al desdichado
que te hace perder tu tiempo
y entretenerlo con una sonrisa,
Si tú sabes aceptar la crítica y
hacer que te sea provechosa sin rechazarla ni defenderte,
Si tú sabes acoger y aceptar
un punto de vista diferente al tuyo,
Si tú rehúsas darte golpes
por tus culpas en el pecho de otros…
entonces vendrá la paz.

Si para ti, el otro es ante todo un hermano,
Si para ti la cólera es una debilidad,
No una manifestación de fuerza,
Si tú prefieres ser herido
antes de hacer daño a alguien,
Si tú no te sientes tan importante que
“después de ti el diluvio”…
entonces vendrá la paz.

Si tú alcanzas y te colocas al lado del pobre
y del oprimido sin creerte un héroe,
Si tú crees que el amor es la única fuerza de disuasión,
Si tú crees que la paz es posible…
Entonces vendrá la paz.



Blogalaxia Tags:

2 comentarios:

Malena dijo...

No creo que sea tan difícil, Joselyn. Sería muy fácil si olvidáramos nuestros egoismos, si dejáramos de considerarnos el ombligo del mundo.

Es cuestión de mirar a nuestro alrededor en vez de a nosotros mismos.

Quizá sí. Quizá es más difícil de lo que pensaba. Quizá algún día llegue esa paz ansiada, pero antes tiene que llegar al corazón de cada uno de nosotros.

Un beso enorme, querida amiga.

Anónimo dijo...

Un corazón y alma noble y de gigantes virtudes.

Te abrazo amiguis!