Solo con mirarse nos decimos mil cosas y compartimos de una manera especial de ver la vida. Los amigos, a veces, se dicen palabras duras, discuten, se hieren y se reconcilian con un abrazo. Los amigos siempre se dicen la verdad, aunque duela, aunque no sea sencillo.
Los amigos son dos almas que van aprendiendo juntos: sinceridades, solidaridades y la alegría de la vida.Tú y yo somos amigos y quiero que esta amistad nunca termine. Por eso, necesitamos estar de acuerdo en ser siempre sinceros el uno con el otro, en compartir nuestros buenos y malos momentos, en la necesidad de señalar y de reconocer nuestros errores. Tú y yo somos amig@s y esta amistad es uno de los tesoros más grandes de la vida. Aprendamos juntos a conservarla, a cultivarla y crezcamos con ella en amor a Dios, su voluntad.
De pequeña me enseñaron a pensar, a razonar, a darle vueltas a todo. Y ahora:
"no pienses que ella no piensa en ti", "no pienses que está con otro", "no pienses que no te echa de menos", "no pienses en lo que has vivido con ella", "no pienses que fue el último beso", "no pienses qué estará haciendo", "no pienses qué va a ocurrir", "no pienses que nunca volverá a acariciarte", "no pienses que ya no te quiere", "no pienses que le quieres tanto...". ¿Cómo se hace eso?